Futuro literato

Estamos muy orgullosos de tener, entre nuestros compañeros, a un finalista  del  X Concurso de Narración. Después de pasar una primera fase, junto con Marta González Hidalgo, seleccionada también para participar en el concurso; Ismael Fernández-Victorio pasó a la gran final. Hemos hablado con él y nos ha contado  sobre esta bonita experiencia:

“Primero, me dijeron que iba a ir a un concurso de narrativa, lo cual me hizo mucha ilusión, ya que solo iban dos personas del colegio: esto significaba que el cuento de Navidad me había salido muy bien. Aunque no sabía todas las sorpresas que me esperaban… Llegó el día e hice el relato en la biblioteca del Instituto Ramiro de Maeztu, un instituto cerca de la calle Serrano bastante amplio y bonito. Me gustó mucho la experiencia y me sentí muy afortunado de haber hecho esto, ya que, como he dicho antes, solo unas pocas personas tienen la fortuna de vivir la experiencia de un Concurso de Narrativa de la Comunidad de Madrid. Días después, me llamaron para que fuese a secretaría. Pensaba que era algo no tan bueno, aunque no era capaz de imaginarme qué habría hecho para tener que ser llamado a secretaría. La tensión recorría mi cuerpo, estaba nerviosísimo y de repente dijeron que había pasado a la final. Al principio, creí que era una broma, o un sueño, o un malentendido, pero al final, poco a poco, me lo fui creyendo. Desde entonces, pasaron muchas cosas hasta la final: me invitaron a un discurso de enhorabuena al que asistieron mis padres, me regalaron  de la Comunidad de Madrid un libro que me gustó mucho y devoré en muy poco tiempo, participé en una entrevista que está en Youtube, en el canal del colegio… Llegó el día de la final. Antes  de  irme, muchos de mis amigos me desearon buena suerte. Mi profesora Margarita, de Lengua y Mates, y yo nos dirigimos allí. Nos dieron la bienvenida y pasé a hacer el cuento. Al principio, nos hablaron del lóbulo frontal y de esa charla sacaron seis palabras que teníamos que incluir en nuestro cuento. Me salió muy bien  y salí de allí con una enorme sonrisa en la cara. Creo que fue una de las mejores experiencias de mi vida y jamás la olvidaré, aunque, por si acaso, tengo dos diplomas: uno entregado el día de la semifinal y otro como  finalista entregado en un evento el 24 de mayo de 2019”.

¡Enhorabuena, Ismael!